domingo, 30 de enero de 2011

Sintaxis del Privilegio Cisexual en Don Giovanni de Arturo Arias, por “una mujer transfeminista”


Desde mi propia mirada y desde mi propia voz como mujer transexual lesbiana y transfeminista desearía hacer una denuncia y una crítica abierta a la publicidad que circula en los medios y en los blogs, promocionando la novela, Arias de Don Giovanni, así como a los comentarios que hace en la prensa su autor, el escritor guatemalteco Arturo Arias.

Lamentablemente, no puedo manifestarme públicamente sin ponerme en grave riesgo físico y emocional. Yo no gozo del privilegio que disfrutan ustedes -y el autor- por ser personas cisexuales (no transexuales), ya que ni su género ni su sexo pueden ser cuestionados y los míos sí, de manera que pueden vivir y moverse libremente sin el constante temor a la violencia focalizada que en cualquier momento, desde cualquier lugar, puede atacarla a uno sencillamente por ser quien es, todo esto con la aprobación directa o indirecta de la sociedad.

Otras mujeres trans seguramente no estarán de acuerdo conmigo, pero también es cierto que cada vez mas mujeres trans organizadas en redes de activismo internacional, nos pensamos a nosotras y nuestras circunstancias de esta manera: Transfobia es la violencia que resulta del ejercicio del privilegio cisexual (no transexual) de creer que el género y el sexo de ustedes son “verdaderos” o más “verdaderos” que el de las personas transexuales.

De acuerdo a su publicidad la novela de Arias trata de “una mujer atrapada en el cuerpo de un hombre” (elPeriodico) y al mismo tiempo según F&G Editores, esta obra es “la primera en abordar en Guatemala las relaciones homosexuales sin tapujos, pero delicadamente.” (Siglo XXI) Esta mezcla de ideas se encuentra a lo largo de todos los comunicados de prensa y las declaraciones de autopromoción del autor. Por un lado se presenta como una obra que trata sobre las mujeres trans, se les llame o no de esa manera y por el otro lado, todo el tiempo se deja muy claro que “en realidad” se trata de un hombre, que se puede llamar Juana o como quiera, hasta se puede hablar en femenino de ella, eso no importa, la realidad es que es un hombre, un hombre homosexual, no una mujer “verdadera”. Se trata de “La sonrisa del Esfinter de su Juana” como dice el autor.

Esto es transfóbico.

Tratar a las mujeres trans como si fueran hombres y a los hombres trans como si fueran mujeres, es transfóbico.

Mostrar la feminidad de las mujeres trans y la masculinidad de los hombres trans como algo artificial que solo encubre su “verdadero” genero y su “verdadero” sexo que, según ustedes, no es aquel que presentan las personas transexuales sino el que ustedes interpretan o les imponen. Todo esto también es transfobia.

Enfocarse en las mujeres trans como objeto sexual y anticiparse a cualquier crítica acusando de ser “políticamente correctas”, exageradas, convencionales o faltas de sentido del humor, a quienes no estemos de acuerdo, es una táctica misógina ampliamente conocida en el feminismo en general.

Me imagino que muchos no lo sabían, pero existe la misma proporción de hombres transexuales, que de mujeres transexuales, pero de eso ni se habla. Lo que importa es hiper-sexualizar e hiper-objetivar a las mujeres trans, que al igual que las mujeres cisexuales (no transexuales) se supone que estamos aquí y valemos sólo para servir a los hombres.

Esto es transmisoginia.

Se habla que la editorial F&G “se arriesgó” publicando esta obra y se subraya su “atrevimiento” como una herramienta de mercadeo a través del escándalo. Atrevimiento para quien? Se convierte a las mujeres trans en criaturas exóticas para luego apropiarse de sus vidas y sus cuerpos y sus historias y con esa materia prima se elaboran productos en este caso estereotipos culturales, para entretenimiento y satisfacción de la fuerza patriarcal dominante.

Esto es colonialismo puro. Explotación descarada de las mujeres transexuales, como ha ocurrido y sigue ocurriendo todo el tiempo con las mujeres en general.

Sería demasiado pedir que fueran las mujeres trans quienes contaran sus propias historias, en ficciones o en documentales, así que si un autor famoso por sus logros literarios va a abordar el tema, por lo menos podría tomarse un poco más en serio las vidas de los seres humanos que retrata.

Al parecer el autor reside en estos momentos en Texas. Ya que le interesa tanto el tema de las mujeres trans ¿Por qué no mejor nos cuenta la historia de las dos mujeres transexuales de San Antonio, que según publicaciones de la semana pasada, fueron violadas por el oficial de policía Craig Nash y por lo cual el policía cisexual recibió apenas un año de cárcel? Los fiscales consideraron que ni valía la pena defender los derechos de dos “travestis”, como llaman peyorativamente las personas cis a las mujeres transexuales, así que lo acusaron del delito menor de uso indebido del cargo.

O ya que anda de viaje por Centroamérica ¿Por qué no habla aunque sea un poco de las más de 45 mujeres trans y hombres gay que han sido cruelmente asesinadas y asesinados en Honduras durante los ultimos meses? Una situación tan crítica que hasta los aliados leales de Tegucigalpa como la Embajada de Estados Unidos acaban de intervenir para unirse a la protesta de las organizaciones de derechos humanos LGTB. Los asesinos no las consideraban “verdaderas” mujeres y decidieron actuar en consecuencia. De todas maneras la sociedad en su conjunto tampoco las tomaba demasiado en serio.

Tanto para las mujeres transexuales que hemos tenido el privilegio de contar con educación y algunas oportunidades, como para las que se han visto obligadas a trabajar en la prostitución para sobrevivir, esas son las consecuencias reales de la transfobia.

Condenamos la violencia contra las mujeres en general y contra las mujeres transexuales en particular, sea en Juárez o en San Pedro Sula.

En las primeras dos semanas de enero fueron asesinadas tres mujeres trans en Honduras, dos de ellas fueron quemadas vivas y se encontraron preservativos masculinos tirados al lado de sus restos, lo que hace suponer que fueron violadas previamente.

Así es como se convierte en sintaxis “La Semántica del Semen”, para las mujeres trans.

(Texto leído por Carolina Escobar Sarti, en la presentación de Arias de don Giovanni, el 28 de enero de 2011 en el Centro Cultural de España). El video de dicha lectura se puede ver en: Facebook