En este blog, en el año 2012, publiqué
diariamente, cronológicamente ordenadas, las violaciones registradas en dicho
informe. Tanto violaciones cometidas por las fuerzas de seguridad del estado,
como por los grupos paramilitares organizados desde ese mismo estado, y las
violaciones cometidas por los grupos insurgentes.
Hace pocos días, el Tribunal A de
Mayor Riesgo dictó una sentencia condenatoria a exmiembros del ejército
nacional por asesinatos, desapariciones forzadas y violaciones sexuales. Como
se ha insistido en diversos espacios, las violaciones sexuales fueron y parece
ser siguen siendo, una arma de guerra reiteradamente usada por el ejército.
Una rápida mirada a los “posts” en
este blog en los primero días del mes de marzo nos arroja varios casos de
violaciones sexuales:
"En ese lugar fue torturada y
violada. Cuando sus antecedentes familiares son descubiertos, aumentan las
torturas y es violada reiteradamente por varios militares."
"...y violaron a mujeres y
muchachas de la aldea incluidas dos niñas de doce y trece años."
"...la trasladaron al
destacamento del lugar, donde sufrió privación de alimentos, malos tratos y
presenció la tortura, violación sexual y ejecución de otras personas."
"Ese mismo día, diez soldados
violaron a una mujer."
"Los soldados violaron a una
mujer mientras la amenazaban para que no hablara de lo sucedido."
"Allanaron la casa de Vicente
Urízar a quien capturaron, al tiempo que violaron a tres personas dentro de la
vivienda."
"A las mujeres jóvenes las
violaron."
"Asimismo, los soldados violaron
a varias mujeres del caserío."
"A varias mujeres jóvenes las
llevaron aparte y las violaron."
A los pocos días de la condena por
Sepur Zarco, trascendió que una niña fue violada en las instalaciones del
instituto militar Adolfo V. Hall del Sur. De lo dicho por autoridades
militares, entre ellos el vocero y el ministro de la Defensa, se puede derivar
que de parte de la institución hay no solo tolerancia sino incluso complacencia
con la violación sexual. Primero calificaron el delito como “incidente”, luego
dejaron que el principal sospechoso del
delito escapara, cuando su obligación era entregarlo a las autoridades
correspondientes, a continuación alteraron impúdicamente una fotografía del
sospechos. Finalmente el ministro de la Defensa, Williams Mansilla, reconoce
que fue “error” dejar que el sospechoso escapara (http://www.prensalibre.com/guatemala/politica/mindef-reconoce-que-fue-su-error-la-fuga-del-soldado).
Foto de Prensa Libre (http://www.prensalibre.com/guatemala/politica/mindef-reconoce-que-fue-su-error-la-fuga-del-soldado) |
Siendo generosos con el ministro y
reconociendo la proverbial incapacidad de altos rangos militares para
expresarse verbalmente, podríamos pensar que lo dicho por vocero y ministro
solo fue el resultado de su poca habilidad verbal. Sin embargo, dados los
antecedentes, lo menos que podemos pensar es que en el seno del ejército sigue
existiendo, sino una promoción, al menos una tolerancia hacia crímenes como las
violaciones sexuales. Es obligación del presidente de la República convencernos
de que como comandante general del ejército no tolera la violación sexual. Es
su obligación destituir al ministro para que asuma frente a los tribunales de
justicia su responsabilidad en la fuga del soldado sospechoso.
Conociendo nuestra historia, podemos
afirmar que no hubo tal error, y que en el fondo lo que hay es complicidad.
De ahí que si el ministro no renuncia,
el presidente está obligado a destituirlo.
18 de marzo de
2016
Año del centenario del nacimiento de Virgilio Rodríguez Macal
Año del centenario del nacimiento de Virgilio Rodríguez Macal