El ilustre señor conde don Luis Rabbé
tuvo que ceder la cabeza del condado y con ello se abrió la posibilidad de
conocer de qué tamaño es la servidumbre del condado democrático conocido como
Congreso de la República.
La serie televisiva Downton Abbey
presenta la vida de la familia de un conde integrada por él, su esposa, dos
hijas, dos nietos, un yerno y una sobrina invitada. En total ocho personas, que
tienen a su servicio mayordomos, mucamas, cocineras, ayudantes de cocina,
aproximadamente unas 10-15 personas. Dos sirvientes por cada uno de la familia
condal.
En Guatemala hace ya algunos años que
han surgido diversos condados, ahora me vienen a la mente Condado Concepción y
Condado Naranjo. Pero hasta ahora había pasado desapercibido el, talvez, más
relevante de todos ellos, el Condado Congreso. Para estar a tono con el
edificio que alberga a la familia condal, en Condado Congreso el personal al
servicio de los miembros de la familia tiene que ser abundante. Las secretarias
no se pueden compartir, cada quien requiere su propia doncella, ujier, ama de
llaves, etc.; 10.78 personas al servicio de cada dipuconde o dipucondesa.
Que Guatemala haya llegado tarde a la
repartición de ducados, condados o principados no significa que no se puedan
tener. Los títulos nobiliarios no pueden faltar: doctores, licenciados. Si no
se es licenciado por lo menos se es bachiller, y el que no llega ni a
bachiller, pues es ciudadano. El más famoso de ellos el Ciudadano Jorge
Toriello.
¿Entonces, no tenemos derecho a una
familia real, aunque sea de plebeyos?