Hoy, martes 15 de diciembre de 2020, fui a la inauguración de la nueva sede del Fondo de Cultura Económica. Como ahora las salidas hay que programarlas muy bien para aprovecharlas al máximo y no estar exponiéndose de manera innecesaria, agendé ir al correo después, para poner una mi cartita. Al terminar la actividad me encaminé hacia el correo.
—Buenas
tardes, ¿adónde viene?
—Buenas
tardes, vengo al correo.
—Póngase gel
y pase adelante.—No recuerdo si murmuró mi temperatura.
Entro y me
dirijo hacia una de las ventanillas. En la de el medio estaba nadie y en los
extremos dos señoritas. Una de ellas al teléfono y en las sillas de espera una
señorita sentada.
—Buenas
tardes, ¿en qué podemos servirle?
—Venga o
poner una carta –dije todo orgulloso, y me sentí como imagino que se debió
haber sentido Aureliano Buendía cuando lo llevaron a conocer el hielo. Y es que
no es poca cosa que después de varios años tengamos servicio de correo postal. Me
dijo que esperara a que se desocupara la señorita que estaba al teléfono. Esperé
un tiempo prudencia y como nadie me atendía me dirigí a quien estaba al
teléfono. Coincidió con que iba pasando otro joven, y él me atendió.
—¿En qué
podemos servirle?
—Quiero
mandar esta carta, certificada. Me la recibió y con ella en la mano se dirigió
a un escritorio situado atrás de las ventanillas.
Unos minutos después volvió con
mi cartita en la mano y un formulario:
—Por favor,
vaya con este formulario al Banrural que está en la 15. Paga ahí los diez
quetzales y con el comprobante de pago vuelve y nos deja la carta.
—Jajajajajajaja—solté
la carcajada—. ¿En serio?
—Sí, es que
aquí no podemos cobrar.
Tratando de contener la risa, tomé mi carta y
el formulario (si no se los muestro, no me lo creen) y por la tarde fui a una agencia
de Guatex a dejarla, esperando que llegue mañana.
Desde que en redes sociales
empezaron a publicitar que ya teníamos correo de nuevo puse en duda el asunto. Finalmente
me dije a mí mismo que bien valía hacer la prueba y eso fue lo que encontré.
Mañana les cuento para quién es
mi carta.
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